Magaly Oliveira: Hola mis lindos amigos, les comparto esta información de la violencia familiar en nuestro Peru.
La violencia familiar y, en general toda forma de violencia contra la mujer, es un problema muy extendido en el Perú. Según un estudio de la OMS del 2002, en diez países del mundo, el Perú resultó ser el más violento contra la mujer. De las veinte ciudades estudiadas Cusco es la más violenta con un 69% de mujeres violentadas por lo menos una vez en su vida y Villa el Salvador la cuarta, con un 51% de mujeres violentadas.
La violencia física, sexual y/o psicológica no sólo tiene un impacto negativo en la salud de los afectados directa e indirectamente, sino también es un grave problema de seguridad ciudadana, pues pone en peligro la integridad, la seguridad y la vida de las mujeres sometidas a ella. La ausencia de mecanismos adecuados para frenar esta forma de violencia, vulnera además el derecho de las mujeres y de las niñas y niños a acceder a una pronta y rápida justicia. Revertir esta situación demanda una atención urgente de parte de las autoridades y debe ser asumida como compromiso de primera importancia del próximo gobierno.
Para entender la lógica violenta de tantos compatriotas, el Instituto de Defensa Legal invitó anoche al doctor Miguel Ramos Padilla, catedrático de la Facultad de Salud Pública y Administración de la Universidad Peruana Cayetano Heredia a que presentará su obra "Masculinidad y Violencia Conyugal. Experiencias de vida de hombres de sectores populares de Lima y Cusco". El Instituto también le solicitó responder a la siguiente pregunta:
¿Cuáles deberían ser las medidas prioritarias del próximo gobierno para frenar los altísimos índices de violencia física, sexual y emocional que ejercen los varones peruanos en sus relaciones de pareja?
La presentación fue comentada Gina Yánez, directora del Movimiento Manuela Ramos y por la Capitana PNP Carmen Aponte, Comisaría de Mujeres en Villa el Salvador. También asistió la Presidenta de la Sala de Familia de la Corte Superior de Lima, representantes de la Fiscal de la Nación y de los Ministros de Educación, Salud e Interior y del Director General de la Policía Nacional, así como representantes de organizaciones de mujeres.
Para Miguel Ramos el contexto social y familiar de los victimarios cumple un papel fundamental. Sin embargo, el recurso a la violencia no solo depende de conductas aprendidas, sino que forma parte de nuestra construcción de masculinidad donde la identidad del hombre se basa en su sentimiento de superioridad frente a la mujer y en su derecho de someterla y dominarla. De acuerdo a este paradigma de masculinidad, esencialmente patriarcal y machista, el uso de la violencia es legitimo para asegurar la posición dominante del hombre en la relación de pareja, sobre todo cuando dicha posición se ve amenazada. magaly oliveira
La violencia física, sexual y/o psicológica no sólo tiene un impacto negativo en la salud de los afectados directa e indirectamente, sino también es un grave problema de seguridad ciudadana, pues pone en peligro la integridad, la seguridad y la vida de las mujeres sometidas a ella. La ausencia de mecanismos adecuados para frenar esta forma de violencia, vulnera además el derecho de las mujeres y de las niñas y niños a acceder a una pronta y rápida justicia. Revertir esta situación demanda una atención urgente de parte de las autoridades y debe ser asumida como compromiso de primera importancia del próximo gobierno.
Para entender la lógica violenta de tantos compatriotas, el Instituto de Defensa Legal invitó anoche al doctor Miguel Ramos Padilla, catedrático de la Facultad de Salud Pública y Administración de la Universidad Peruana Cayetano Heredia a que presentará su obra "Masculinidad y Violencia Conyugal. Experiencias de vida de hombres de sectores populares de Lima y Cusco". El Instituto también le solicitó responder a la siguiente pregunta:
¿Cuáles deberían ser las medidas prioritarias del próximo gobierno para frenar los altísimos índices de violencia física, sexual y emocional que ejercen los varones peruanos en sus relaciones de pareja?
La presentación fue comentada Gina Yánez, directora del Movimiento Manuela Ramos y por la Capitana PNP Carmen Aponte, Comisaría de Mujeres en Villa el Salvador. También asistió la Presidenta de la Sala de Familia de la Corte Superior de Lima, representantes de la Fiscal de la Nación y de los Ministros de Educación, Salud e Interior y del Director General de la Policía Nacional, así como representantes de organizaciones de mujeres.
Para Miguel Ramos el contexto social y familiar de los victimarios cumple un papel fundamental. Sin embargo, el recurso a la violencia no solo depende de conductas aprendidas, sino que forma parte de nuestra construcción de masculinidad donde la identidad del hombre se basa en su sentimiento de superioridad frente a la mujer y en su derecho de someterla y dominarla. De acuerdo a este paradigma de masculinidad, esencialmente patriarcal y machista, el uso de la violencia es legitimo para asegurar la posición dominante del hombre en la relación de pareja, sobre todo cuando dicha posición se ve amenazada. magaly oliveira